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La Tutoría: el peso de lo intangible

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                      Hay un relación intrínseca entre las tutorías y este mural. En el mural Anubis pone en uno de los platos de la balanza el corazón del difunto y del otro una pluma. Las acciones que representan el corazón tienen que ser livianas y no deben tener tacha. Al fin y al cabo lo que queda de la vida es la ψυχή ( psijé ) que es algo que nosotros podríamos llamar alma o interior o conciencia. Los contenidos de la tutoría circulan en torno a la ψυχή y por eso esta asignatura que tiene el contenido más intangible e invisible es la que más pesará en el currículum de una vida.              Poniendo las cartas boca arriba podemos decir que al fin y al cabo la E.S.O prepara ciudadanos, es decir, gente comprometida socialmente, con ciertos valores y normas. Que alguien sepa o no sepa la fecha de la Revolución Francesa es irrelevante. Lo importante es que indirectamente porte los valores de la Revolución que hoy cimientan Europa. Por eso la tutoría pasa de ultimo a primer puesto en

Macedonia de ballet, Withman, Reddin y Fullat (actividad 12)

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            Vamos a intentar forzar a los cuatro para que acaben formando parte del mismo plato. Empecemos con Wihtman: Tendría fácil escoger el verso "que prosigue el poderoso drama" o el "que existe la vida y la identidad" pero voy a coger el camino largo y oscuro para llegar al mismo sitio. Mi verso es "del desfile interminable de los desleales" porque lo que pretende un buen profesor es que sus alumnos desarrollen su sentido crítico y por lo tanto, muy seguramente, desleal. Un profesor tiene que admitir la alteridad y la diferencia, pero más aún tiene que ser consciente de que su verdad con el tiempo será una verdad pasada y puesta en jaque por sus discípulos.           La profesora de Billy es una profesora fracasada que ve en Billy ese alumno desleal hacia ella y hacia su sociedad. Cuando Billy destaca ella adapta su clase para que sea el centro y cuando rebasa a los demás ella le dedica clases adaptadas a él. Trabaja con sus sentimientos para crear

Utopía, futuro y educación

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            He estado echando un vistazo al artículo de El Semanal y lo veo más cerca de la locura distopica que de la realidad. No nos engañemos, la educación en España - sobre todo la pública - es reacioa a los cambios. Se caracteriza por ser conservadora e incluso reaccionaria en algunos sectores. Dentro de diez años la situación no habrá cambiado mucho: funcionarios inhabilitables, fracaso escolar y poca innovación pedagógica.             Pero soy un gran creyente de esta nueva generación de docentes que hace unos años está renovando el polvoriento claustro de profesores y creo que hay más vocación y más empatía hacia el alumno. Creo que lo que más cambiará será la cercanía en la relación profesor-alumno. En diez años además estarán implantados con fuerza los idiomas y las TICs. Espero que haya un hueco para las artes porque creo que la habilidad del futuro será la creatividad.           También espero que no hayan desaparecido las pizarras de tiza porque tienen un t

Jugando a evaluar y Evaluar jugando

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              La memoria tendrá sus bondades pero desde luego no en el estudio. Cuando se tienen que aprender datos o "puntos de un proyecto educativo" y se recurre a la memoria, se estudiará a bocanadas rápidas y ni siquiera lo vomitaremos en el examen. Más bien lo regurgitaremos, como hacen los cormoranes con el pescado, que sale casi como entra, sin cambio ni ganancia para el ave. La nueva pedagogía no apuesta por regurgitar porque no es nada productivo para el alumno. Éste aprobará y mañana si no es al poco tiempo olvidará todo para poder meter otra remesada de contenido rápido necesario para aprobar un nuevo examen.           De hecho la nueva pedagogía no ve tampoco con buenos ojos los exámenes porque no solo valoran conocimientos sino habilidades que van ligadas como rémoras a ese tipo de prueba y que nada tienen que ver con contenidos académicos. El portafolio es sin embargo una cocina a fuego lento,donde se tiene que leer, buscar, discriminar y finalmente comparar co

Ranking

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                Nunca me ha gustado mucho diferenciar porque cuando hay ganadores por definición aparecen los perdedores. Aún así Aquí van las cinco mejores entradas que he encontrado entre los blogs del grupo 3. No me he leído todos, porque lo que soy un juez un tanto informal. No siguen un orden de preferencia:   Débora, Céteris páribus:   Por demostrarnos que lo que llamamos necesidades especiales tienen nombres, apellellidos y conviven con nosotros. No son números sino primos, hermanos o novios. Débora enriquece la entrada con su experiencia. https://ceterisparibus2020.blogspot.com/2020/10/o-pelouro-reflexion-personal.html  Pablo Doménech: Cést Pablo Doménech: Por ser valiente y realista criticando la mano que nos da de comer.  https://cestpablodomenech.blogspot.com/2020/10/segunda-critica-al-sistema-segun-san-yo.html   Alberto Baena: Panta rei: Por regalarnos una definición de educación que en sí misma educa y que al igual que la buena docencia se regala más el medio que el fin 

La mujer detrás del I.E.S. Teresa Oñate

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                    Cuando acabé Historia no pude llegar a tiempo de matricularme en el Máster que quería. Por eso me hice un año de filosofía - recomendado a todos - donde tuve la suerte de ser alumno de este huracán de mujer. No me gustan las quinielas, pero se que algún día Mayorga ganará el Nobel de literatura y esta mujer ganara el premio Nietzche, que es el nobel de filosofía. Estar junto a ella abruma y acongoja un poco pero es muy emocionante.           Esta señora estudia el pensamiento en Grecia, sobre todo el preplatónico y el aristotélico, pero eso le llevó al presente, porque se dio cuenta de que la filosofía griega de la alteridad era la misma solución - y no por casualidad - que la que dieron los pensadores postmodernos a las filosofías duras como la ilustración y los metarrelatos. Por eso cuando mi grupo pensó en una figura que representara el pensamiento crítico en España pensé que no había nadie mejor que ella.  Algo de ésto nos contaba nuestro compañero Alberto en su

Reglas y Costumbreros; a propósito del Libro Blanco

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         Todos los monasterios medievales tenían una Regla que los adscribía a un tipo de vida en común y que les daba pautas de como organizar su día a día. En apenas cincuenta capítulos se especificaba cuándo y cómo rezar, cuándo dormir y qué comer. Sin embargo si nos trasladáramos a la Edad Media y visitáramos un cenobio encontraríamos el libro de Reglas ricamente encuadernado e intacto y a su lado un Costumbrero manoseado y lleno de tachaduras. Y es que la verdad es que por debajo de estas reglas aúlicas había centenares de normas adaptadas a la realidad de cada monasterio. Puertas para adentro la vida la regían los costumbreros o libros de costumbres donde se relajaban las normas. Aún así, si preguntáramos a un monje cual era su constitución diría rápidamente que su santa regla. Imaginaros en la imagen de arriba solemnes palabras de agradecimiento y pensamientos cínicos a la vez. Esta brecha entre la teoría y la práctica, la norma y la costumbre es algo muy humano.      Y est